Declaración del Santo Sínodo
en relación con la propagación de la infección por coronavirus
El documento fue aprobado en la reunión del Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Rusa el 11 de marzo de 2020.
El Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Rusa percibe con preocupación la propagación de la infección por coronavirus en el mundo y sus consecuencias para millones de personas, muchas de las cuales no sólo se encuentran ante la amenaza de contagio, sino que también han sufrido las consecuencias socioeconómicas del fenómeno.
Los miembros del Santo Sínodo expresan sus condolencias a los familiares y próximos de las víctimas de la enfermedad en China, Corea del Sur, Irán, Italia, Francia, Alemania, España y en otros países.
Son bendecidos ante el Señor los esfuerzos de los médicos y los voluntarios, que elaboran e implementan medidas médicas y preventivas para atender a los enfermos y prevenir la propagación de la enfermedad.
En la época de las epidemias, la Iglesia Ortodoxa Rusa siempre ha ejercido su servicio evangélico, sin negar a nadie el alimento espiritual y la plena participación en sus Sacramentos. Hacemos un llamamiento a la moderación, al mantenimiento de la sobriedad y a la oración en paz, prestamos la atención sobre el hecho de que la persona creyente no debe sucumbir al pánico y los temores asociados con la difusión de información no verificada sobre la infección.
Sin embargo, no es aceptable tomar a la ligera la infección por coronavirus, descuidar las prescripciones médicas, ignorar las medidas preventivas y poner en peligro a sí mismos y a los demás.
El Santo Sínodo considera importante el cumplimiento constante y riguroso de las medidas de higiene preventiva en las parroquias y monasterios, especialmente en las regiones donde la situación epidemiológica se considera oficialmente grave, incluido el uso más amplio de soluciones sanitarias para desinfectar los kivotos de los íconos a los que se aplican los fieles y el uso de vasos desechables para beber.
En el caso de la propagación de la infección por coronavirus en una región determinada, se pueden adoptar medidas preventivas adicionales en coordinación con los superiores de la Iglesia.
El Santo Sínodo exhorta a los obispos, sacerdotes, monásticos y laicos de la Iglesia Ortodoxa Rusa a una oración fortalecida para superar la enfermedad y otorgar fuerzas a los médicos que luchan contra ella.
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